¿Estáis cansados de recorrer siempre los mismos típicos arcade japoneses? O aunque no lo estéis, ¿simplemente queréis entrar en algo diferente? Entonces no os podéis perder el lugar del que os hablamos hoy.
En la zona de Kawasaki, cerca de Tokyo, existe este edificio modelado igual que el barrio de Kowloon, en Hong Kong. El detalle es espectacular, cualquiera diría que ha cambiado de país sin salir de las fronteras de Japón. El ruido de las máquinas de arcade es lo que nos hace recordar dónde estamos en realidad.
Pero no os dejéis engañar: este salón de arcade está dentro de un edificio comercial moderno (aunque estilizado al estilo de hierro y óxido del interior. Mientras uno camina hacia el ascensor puede ver ventanas a falsas salas de prostitutas, a tiendas de dudosa comida, etc. En las paredes se han simulado manchas de humedad y suciedad, y extraños anuncios para darle el toque. ¡Incluso enviaron basura de Hong Kong para dejarla allí!
Durante todo el recorrido nos sentiremos como en la angustiosa zona de Kownloon, pero al final, una vez salgamos por una salida trasera, es posible encontrarse en un mundo de fantasía y ciencia ficción. Debemos pasar por un túnel iluminado con bombillas rojas, una "piscina" con niebla y falsas piedras por donde habrá que pisar, e incluso una puerta con forma de ying-yang.
Para aquellos interesados en ir, su horario es de las 9 de la mañana hasta las 11:45 de la noche.
En la zona de Kawasaki, cerca de Tokyo, existe este edificio modelado igual que el barrio de Kowloon, en Hong Kong. El detalle es espectacular, cualquiera diría que ha cambiado de país sin salir de las fronteras de Japón. El ruido de las máquinas de arcade es lo que nos hace recordar dónde estamos en realidad.
Pero no os dejéis engañar: este salón de arcade está dentro de un edificio comercial moderno (aunque estilizado al estilo de hierro y óxido del interior. Mientras uno camina hacia el ascensor puede ver ventanas a falsas salas de prostitutas, a tiendas de dudosa comida, etc. En las paredes se han simulado manchas de humedad y suciedad, y extraños anuncios para darle el toque. ¡Incluso enviaron basura de Hong Kong para dejarla allí!
Durante todo el recorrido nos sentiremos como en la angustiosa zona de Kownloon, pero al final, una vez salgamos por una salida trasera, es posible encontrarse en un mundo de fantasía y ciencia ficción. Debemos pasar por un túnel iluminado con bombillas rojas, una "piscina" con niebla y falsas piedras por donde habrá que pisar, e incluso una puerta con forma de ying-yang.
Para aquellos interesados en ir, su horario es de las 9 de la mañana hasta las 11:45 de la noche.